Cosecha. Poema de Rocío Biedma.
(Imagen de la Red) Dejo caer mi corazón, adentrarse en la turba para ver cómo se acrecienta, tras haber hibernado en la linde de la espera. Emerge el hijuelo, se despierta el espectro, eclosinan las yemas y una pleamar de flores blancas aletean como libélulas, anegando el cerezal. Más tarde las drupas estallan su carmesí asemejando un manto de astros encendidos. Es hora ya de saberse una cosecha inviolable. (Del poemario Cerezas en Inviern...